La mayoría de las veces lloro de rabia y de tristeza. Las menos, de alegría. Esta vez es una de ellas. Me acabo de enterar de que King kong, el viejito enfermo de Arca de Noé que os puse el otro día, ha sido adoptado, además por una chica que fue voluntaria y ha estado muy preocupada por él todo este tiempo. Estas cosas son las que te emocionan y te animan. Mirad como está, parece hasta más joven.
domingo, 14 de septiembre de 2008
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2 comentarios:
¡Qué alegría pobrecillo mío! Con esa carilla de bueno que tiene...Me alegro por él.
Madre mia yo no había visto a este peluchote!! Si fuera mio estaria todo el dia achuchandole XD
Las cosas no cambian de la noche a la mañana, pero van saliendo cada vez más gente que se preocupa por los viejines, que también tienen su derecho.
Yo es que muero de la pena cada vez que sale un caso así y nadie los quiere.
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