Ricks lleva más de un año en la calle.
Está muy delgado, seguramente tendrá lehismania. Vive asustado y sólo sale por la noche cuando una buena mujer le pone de comer. Ella dice que es muy cariñoso pero nadie puede hacerse cargo de él. En fin, lo de siempre todos estamos llenos a lo que se añade, al menos en mi caso, la falta de recursos económicos para poder buscar una solución.
Además, aparentemente el animalico no tiene signos de estar herido o en peligro de muerte inminente y estas son cosas que a la gente le hace moverse para salvar a un perro o un gato, pero eso no quiere decir que no tenga heridas, tiene las heridas del alma, de estar solo, de tener miedo, de no tener quien lo quiera y estas heridas, en muchas ocasiones, son más brutales que las físicas. Se acerca el invierno, otro invierno, y él sigue en la calle. Si alguien pudiera acogerlo y darle la oportunidad de ser feliz... Por favor, poneos en contacto con:espinamor@hotmail.com
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