
Que sí, que es él, es MILO, el podenquito de Córdoba. Mirad que bien está, es increible la capacidad de recuperación de estos animales. Y buenas noticias: hay una buena familia de Finlandia interesada en adoptarle y mientras se recupera se quedará en casa de la hermana de Loly. Ya verás que feliz vas a ser Milo, has perdido una patita pero has ganado la felicidad
INCREIBLE!, estos peludos cada dia me sorpreNden más....felicidades milo!!
ResponderEliminarNunca mejor dicho lo de una foto vale más que mil palabras.
ResponderEliminarQue alegria, impresionante.
ResponderEliminarCuanto me alegro!
ResponderEliminarQue alegría mas grande, felicidades pequeño.
ResponderEliminarPues me entran unas ganas de llorar de alegría que no lo sabes bien. Pobrecito pequeño lo mal que lo ha tenido que pasar...con lo guapo que está ahora, dá gusto verlo, le faltará su patita pero tiene una vida por delante y seguro que va a ser muy feliz.
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